¿Cómo saber si realmente estás en el momento adecuado de invertir tiempo y dinero en copywriting?
A menudo me encuentro con este dilema entre mis clientas:
- ¿Es una inversión a la que sacaré partido ahora mismo?
- ¿Realmente me hace falta si estoy empezando?
- O, yo ya tengo clientes, ¿qué cambiará si hago esa inversión?
Es cierto que nada en marketing es blanco o negro, pero sí puedo asegurarte que hay motivos potentes para que te plantees de una vez invertir tiempo y dinero en copywriting. Sí, tiempo también porque un copywriter que se precie necesitará que tú también te impliques para sacar los textos más eficaces posibles.
1 El dinero que puedes perder
A más de un copy le he oído quejarse porque algún cliente le pregunta por garantías.
Si contrato tus servicios, ¿cuánto más me aseguras que venderé?
En realidad la pregunta es absurda. No se puede asegurar tal cosa, al igual que si trabajas el branding de un cliente no puedes garantizarle que venderá más y que ganará autoridad.
No utilizar copywriting en tu web minará tu marca personal, tendrá efectos negativos en tu diferenciación y hará que vendas menos
Ahora sí, si tu cliente continúa con un logo hecho en Canva y un branding inexistente, ¿a que puedes augurarle peores resultados por su imagen tan poco profesional?
Pues lo mismo ocurre con el copy.
Si dejas de utilizar principios persuasivos a tu alcance, si no le cuentas claramente a tu cliente qué gana él contando con tus servicios perderás ventas, de esas que traen dinero fresco.
2 Tienes claro lo que quieres transmitir, pero no sabes cómo
Has trabajado tu valor diferencial, te has currado tu marca personal desde la base y sabes que tienes un servicio potente porque responde a las necesidades de tu público objetivo.
El problema es que no sabes por dónde comenzar a transmitir todo eso a través de los textos de tu web.
Cuando comienzas a escribir suenas a todo menos a ti misma y no logras generar la emoción predominante que te habías propuesto producir en los lectores.
Puedes hacer dos cosas:
- Ignorar todo tu trabajo y quedarte con unos textos a medio fuelle.
- Sacar partido a todo tu valor y contratar a alguien que sepa cómo transmitir lo que te diferencia de las demás.
3 Tienes clientes, pero no siempre se parecen al ideal
Atraes clientes pero te cuesta acertar con el cliente ideal.
Ese con el que te gusta trabajar, con quien la química salta al momento y te trae «proyectos caramelo».
Es probable que tus valores y tu personalidad no esté traspasando la pantalla y los lectores de tu web no te perciban de verdad.
Hay ciertos detalles, en las palabras que usas, en lo que cuentas y cómo lo haces que tienen la capacidad de atraer y seducir a las personas que piensan y sienten igual que tú. Ese es el poder de las palabras.
4 Tus clientes te hacen creer que eres la más cara del universo
Tiemblas cuando pasas un presupuesto. De hecho, es tu peor momento del día. Con demasiada frecuencia recibes un no o una callada por respuesta.
¿Cómo estás presentando esas propuestas?
¿Qué información compartes y cómo lo haces antes de que te pidan precio?
Atender a los textos y que estos transmitan el problema principal que estás solucionando hará que el precio quede en segundo (o tercer) lugar.
Al final lo que todos queremos cuando tenemos un problema molesto son soluciones, ¿te has parado a pensar en si es en esto en donde más energía estás aplicando?
Y tú ¿qué piensas?
¿Estás en alguna de estas situaciones? ¿Quieres que valoremos juntas si es tu momento de contar con una copywriter? Podemos hablar durante 30 minutos para descubrir (y es gratis 😉 )